Una señora anciana de 75 años jamás pensó que querer lo mejor para su hijo se iba a convertir en un calvario para ella.
Y es que ayudó a su hijo para que se fuera a estudiar a los Estados Unidos y ahora el hijo trabaja y vive su sueño americano, pero paso algo imperdonable y es que se olvidó de su madre que tuvo que hipotecar su casa y después de trabajar y pagar algunas cuotas por 3 años y llegó a caer enferma.
Dejó de pagar ya que su hijo no le mandaba dinero y se olvidó de ella; ahora el banco le embargo su casa y todos sus bienes y ella quedó en la calle ahora un grupo de vecinos que la llegaron a conocer juntaron $500 dolares y construyeron en un espacio, una pequeña casa para vivir sus últimos años ya que el hijo se olvidó total de su madre.
Por eso hijos núnca sean ingratos con el ser que les dio la vida.
Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.
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