Un lamentable accidente ocurrió en la ciudad de Capiatá, donde un bebé de tan solo un año perdió la vida tras atragantarse con un caramelo. El hecho tuvo lugar en la vivienda de la familia mientras el pequeño jugaba con sus hermanos.
De acuerdo con el testimonio de la madre, una de las hermanas mayores, de apenas cinco años, le entregó el dulce sin percatarse del peligro que representaba. El caramelo provocó una obstrucción en las vías respiratorias del niño, causándole asfixia.
En medio de la desesperación, la familia trasladó al menor de urgencia hasta el Hospital Distrital de Capiatá. Sin embargo, al llegar al centro asistencial, los médicos confirmaron que el bebé ya no presentaba signos vitales.
La víctima fue identificada por sus iniciales J.M.V.B., hijo de Amelia Benítez y Marcelino Vega Aquino. Vecinos y allegados expresaron su consternación por lo ocurrido y enviaron mensajes de apoyo a la familia, que enfrenta un profundo dolor por la pérdida.
El caso será investigado por las autoridades para esclarecer las circunstancias del suceso. Aunque todo indica que se trató de un accidente doméstico, se recuerda la importancia de la supervisión permanente de los niños pequeños y de evitar que tengan acceso a objetos o alimentos que representen riesgo de asfixia.
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